Esta mañana, sin levantar la zona donde la espalda pierde su casto nombre, he estado en bastantes departamentos municipales. Estoy en un pequeño Ayuntamiento. Veamos.
Tras iniciar la jornada con una rápida visita al Departamento de Documentación para examinar BOP-BOCA-BOE, me he constituido en el Departamento de Intervención y Tesorería y he firmado las órdenes de pago del mes. Previamente me había constituido en el Departamento de Alcaldía y había formalizado el Decreto de aprobación. Y más previamente desde Intervención había fiscalizado los pagos… Bueno echar una vista al menos para comprobar que no hay ninguna aberración.
A continuación me he ido al Departamento de Medio Ambiente y he estado gestionando la adquisición de un Boxican para guardar perros abandonados a la espera de su recogida por los servicios de la Diputación. Aunque lo hemos intentado ningún trabajador municipal se ha mostrado dispuesto a cazar perros callejeros sueltos o abandonados, dicen que a ver si les van a morder. Así que el Boxican está muy bonito en el rincón en el que se ha colocado pero ahí se quedará durmiendo el suelo de los justos (hay que señalar que hace un tiempo instalamos un pipican en una zona a las afueras con la idea de que los canes excretaran allí sus cosas en vez de en la calle. La experiencia demuestra que hay cola… Hay que pedir hora para usarlo. Supongo que se entiende el sarcasmo.
Mientras hemos tenido que atender a algún ciudadano en mostrador o en despacho; una vez terminado lo anterior, en el mismo Departamento de Medio Ambiente pero en otra Sección, he atendido a un ciudadano que se queja de ruidos provenientes de un bar musical sobre el que recientemente, y constituido en Departamento Jurídico de Infracciones y Sanciones, le impusimos una multa y cierre temporal del local, con precinto realizado en Comisión municipal constituida en el lugar al efecto.
Después desde el Departamento Nosesabecuál (quizás Estadística) he atendido posteriormente a una circular sobre las próximas Elecciones, materiales electorales, calendario, etc. Comprobaciones materiales. Todo correcto.
Al rato, desde el Departamento de Contratación, unido temporalmente al de Patrimonio, hemos terminado de formalizar expediente de adquisición de mobiliario, con adjudicación, notificaciones, llamadas a algún contratista, etc. Sin solución de continuidad y con mis glúteos bien asentados en la roída silla que ya brilla por desgaste, me he pasado al Departamento de Transparencia para su correspondiente publicidad. Aprovechando que estaba en el Dpto. de Transparencia he aprovechado para insertar alguna otra cosilla como los análisis de agua del mes.
He pasado varias veces por el Dpto. de Informática para resolver algún pequeño problema digital; generalmente se solucionan reseteando. Alguna ocasional actualización y desactualización de Java (alguna plataformas de algún organismosólo funcionan con la penúltima o antepenúltima actualización de Java. Entrar y salir en Chrome Explorer o Mozilla porque otras plataformas no se llevan bien según sea.
Desde Secretaría General he atendido a un Concejal que precisaba alguna información y alguna que otra gestión en relación con su Área Funcional.
Un Informe con propuesta de un acuerdo que tiene que ir a Pleno y en Estadística de nuevo he firmado un par de certificaciones de empadronamiento.
A mitad mañana, desde Urbanismo, he firmado un par de licencias de obras y he reestudiado el tema de los núcleos zoológicos a raíz de la vista de un ciudadano que quiere instalar una reala, que si más o menos de 20 perros etc.
Hace un tiempo también tuve que estudiar las acciones oportunas para solucionar el problema de una señora mayor que padece el Síndrome de Noé. Y hace un tiempo también tratamos (a nivel meramente sintomático) un caso de Síndrome de Diógenes. Orden de ejecución urbanística y si hubiera podido, orden de examen psiquiátrico. Internet nos ayuda a comprender trastornos mentales que ni sabíamos que existían pero que inciden en la convivencia ciudadana y en la necesidad de tomar medidas, aun empatizando con el pobrecillo/a que los padecen.
Desde el Departamento de Patrimonio llevo unos días preparando documentación para la adquisición de unas porciones de suelos rústicos en los que hay que ejecutar una protección tierras del Río ante las recidivantes inundaciones. Eso me llevará más tiempo, así que por partes.
Espera turno en el Departamento de Servicios Jurídicos un expediente de responsabilidad patrimonial debido a un accidente en la vía pública de una señora despistada.
Dentro de un rato deberé comprobar los términos de un Convenio plurianual con la Comunidad Autónoma que finaliza y se cierra este ejercicio.
Milagro, hoy no hemos tramitado nada relacionado con subvenciones. Ni hemos enviado nada al Gobierno Autonómico, al Central, ni a la AEAT, ni al Defensor ni al órgano externo de control. Ni a Hacienda o al Sursumcorda. Delegado de todo. Especialista de nada. Navegando en una balsa como los Rapa-nui, sin saber muy bien el destino o si llegarás a alguna parte.
Como comentaba un colega hace años, en un pequeño Ayuntamiento el cargo se debería denominar Secretario-Interventor-Misionero-Tesorero-Gestor. La normativa de habilitados nacionales sigue sin reconocer las funciones que por nasalidad tenemos que desarrollar sí o sí. O al menos hacerse mención en una RPT con la consiguiente compensación. ¿Cómo dice?, ¿qué es eso? ¿Para cuándo una reforma que atienda a la realidad? Trataremos este asunto más adelante, solucionas haylas pero voluntad de hacer algo, muy poquicas.
Hombre [o ejem mujer] orquesta. Chunta-chunta-bum-bum. Todo suena a la vez. Jesús, ¡qué sensación de que casi todo mal!, ¡qué estrés!