Durante los meses de julio y agosto de 2007, en las carreteras españolas se produjeron un total de 465 accidentes mortales, en los que fallecieron 540 personas, 239 resultaron heridas graves y 260 heridas leves. Posiblemente, la entrada en vigor del carnet por puntos y sus reformas (sancionadoras) anejas y la –hasta ahora insuficiente- mejora de las redes secundarias sean medidas que contribuyan a paliar esas cifras que, a juicio de quien suscribe, siguen siendo demoledoras.
La mayoría de españoles disponemos de nuestras vacaciones en agosto, y personalmente me gustaría volver y que todos volviérais a nuestras queridas Administraciones en septiembre, para disfrutar de un estimulante síndrome postvacacional o de una sensual discusión con el Alcalde. Pensar que, por desgracia, no va a ser así en todos los casos, me causa un gran pesar. No cabe duda de que, a pesar de las medidas que la DGT y que otros poderes públicos puedan concebir y ejecutar, y sin perjuicio de los intangibles, de las circunstancias que no dependen de nosotros, sería buena idea mantener un punto de prudencia y de cordura compatible con la relajación y el ocio. Y no sólo al volante, sino también en otras lides, como en los baños playeros o piscineros, las comidas (y bebidas), y otros excesos… Y no sólo para nosotros, sino también – y sobre todo- para los que nos rodean… Servidor no pretende ser la voz de la conciencia de nadie, pero se conforma con que al menos uno de los lectores de estas sencillas líneas pueda verse influido positivamente por ellas. Por eso el comentario de hoy no es jurídico, ni técnico, ni siquiera es “de opinión”. Se trata únicamente de un consejo, que seamos prudentes; acompañado de un desiderátum: Felices vacaciones; nos vemos dentro de un mes… de acuerdo?
¡Algunos ni nos vamos de vacaciones, así que seguro que nos vemos dentro de 1 mes! (O mañana, si os place)
¡Feliz agosto vacacional a todos!